Guadalajara, Jalisco.

El reconocimiento de la persona como eje central de los derechos humanos y de las políticas públicas y de las universidades es uno de los retos que enfrentan las universidades públicas de México, señaló el titular de la Defensoría de los Derechos Universitarios (DDU) de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Dante Haro.

Durante la conferencia “Actualidad de los Derechos Universitarios y Cultura de la Paz” realizado en el Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas de la UdeG, el también presidente de la Red  Iberoamericana de Defensorías Universitarias (RIdDU), mencionó que el gran pendiente de las universidades es contar con defensoras y defensores de derechos.

“Que exista una defensoría, que defienda los derechos de los universitarios. Aquí en México todavía no es posible ya se presentó ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos ante la Secretaría de Educación apoyados solamente por la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior. 

Y próximamente se estará presentando en esta ley general de educación superior que cualquier universidad pública o privada que esté al final de cuentas funcionando en México tenga una defensoría.

El gran reto es que todas las universidades tengan una institución, una dependencia, una área que defienda los derechos humanos en estos entornos universitarios todavía está para largo”.

Dante Haro mencionó que en la Ley general de educación de España, Portugal y  Perú es obligatorio una defensoría universitaria, mientras que en Brasil, Colombia y Chile están a un paso de tener una.

• En el encuentro con expertos en defensa de los Derechos Humanos de las, los y les universitarios, el coordinador del programa integral de cultura de paz del CUCEA, Alfredo Orozco Mendoza se refirió a la recuperación de la identidad y reconocimiento de la persona en su ámbito educativo.

“Uno de los desafíos más apremiantes de la universidad es rescatar esta identidad, es promover estos valores más allá de la materia de ética (...) es ser conciencia es reconocernos como seres humanos”.

Los panelistas concluyeron que el gran reto de las defensorías de derecho humanos en las universidades  es ser promotor de cambio para lograr una cultura de paz.