“Duerme, cicatriz”: la novela femenina que también interpela a los hombres




Guadalajara, Jalisco.

Aunque Duerme, cicatriz, la nueva novela de Nora de la Cruz, está escrita desde y para la experiencia femenina, la escritora ha comprobado que sus lectores no se limitan a las mujeres.

"Nos acaba de suceder en una presentación que tuvimos, el presentador justo me decía que el personaje con el que se había identificado más era la protagonista. Y a mí me sorprendió mucho.

La novela sí está escrita para hablar de la experiencia de crecimiento femenina, desde el lugar más íntimo posible que es el cuerpo, todo pasa por las experiencias corporales… pero lo que me comentaba este lector es que con lo que se identificó muchísimo era con que, al final del día, Lina es una inadaptada".

“Duerme, cicatriz”: la novela femenina que también interpela a los hombres

Lina, la protagonista, vive “ciertas expectativas de lo que debería hacer o de cómo debería comportarse”, pero no logra encajar. Desde ahí, la novela abre una grieta en el discurso tradicional del “coming of age” para mirar, desde otro ángulo, cómo crecen las mujeres.

"La intención sí era muy clara: poner en literatura experiencias que, entre mujeres, compartimos y conocemos sin necesidad de explicarlas, pero que posiblemente los hombres nunca habían pensado a profundidad y quizás es una buena oportunidad para hacerlo".

La novela se sostiene también sobre una intención de reparación narrativa. La autora ha reflexionado sobre los modelos tradicionales en los relatos de infancia y adolescencia, sobre todo desde su trabajo académico:

"Todos los cuentos de hadas que tiene protagonistas femeninas son lecciones de obediencia, siempre están enseñando que aunque seas bonita debes ser humilde, amable, cuidadora, etcétera.

Y el gran premio, la gran experiencia de crecimiento para las mujeres es el amor, el matrimonio y la maternidad y en el siglo XXI el amor, matrimonio y la maternidad, no necesariamente son alcanzables o deseables para todas".

“Duerme, cicatriz”: la novela femenina que también interpela a los hombres

Foto: Héctor Navarro

  • Con una prosa incisiva, que combina humor y empatía, Nora de la Cruz devela el rostro menos romántico de la maternidad, y en Duerme, cicatriz muestra el carácter femenino en su momento más vulnerable.

Héctor Navarro