Guadalajara, Jalisco.
Aun con pruebas de ADN realizadas y una red interna de fotografías de personas desaparecidas en las instalaciones del Servicio Médico Forense de Jalisco, el calvario aún es más inquietante, debido a que dichas imágenes son las mismas que ven las familias cada quince días que ingresan para reconocer a un familiar.
Desde el 14 de junio de 2024, Leticia López Patiño busca a su hijo Iván de Jesús Luna López. A ella y a su esposo le hicieron las pruebas de ADN y cada martes acude al SEMEFO con la esperanza de identificar a su hijo a través de alguna imagen.
“No me dicen nada aquí en SEMEFO, lo único que hacen es enseñarme la pantalla. Hace ocho días me pase a búsqueda y sale lo mismo, yo veo a las mismas personas que me enseñan. Las mismas muestras que paso a ver”
“Veo a personas ya sin vida, pues yo veo las mismas la verdad; últimamente he visto a un señor gordito, moreno, desnudo o con sus caras transformadas, pero cada quince días veo lo mismo. Yo no veo que pongan más como que cada quince días nos enseñan lo mismo”.
Mientras que, la familia de José de Jesús Rodríguez Guerrero desde noviembre del 2023 lo buscan. Cada martes su hermana Martha Patricia acude al SEMEFO para poderlo identificar.
“A mi sobrina le sacaron el ADN y a mi mamá hasta ahorita, hemos venido a buscarlo y todavía no sabemos nada de mi hermano.
Ahorita vine me enseñaron las fotos, pero no es nada de mi hermano. Es segunda vez que vengo, pero es la primera vez que me meto a ver fotos y no sale nada de mi hermano”.
“-¿Llegan a ver prendas que se puedan identificar? No más me enseñaron dos prendas, pero no, no eran las de mi hermano".

Marta Patricia Rodríguez Guerrero busca a su hermano José de Jesús Rodríguez. Foto: Isaura López
De diferentes partes de Jalisco cada martes las familias de personas desaparecidas, en su mayoría mujeres acuden a las instalaciones del SEMEFO con la esperanza de identificar a sus familiares.
- Mientras pasan del módulo de FUNDEJ, Familias Unidas por Nuestros Desaparecidos Jalisco sacan sillas y escobas para limpiar el jardín donde esperan el ingreso, en lo que abren las puertas del SEMEFO rezan el rosario y del otro lado, hay personal de servicios funerarios a espera de abordar a una persona que pudo identificar a su familiar.