Cihuatlán, Jal.

En los últimos años, los habitantes del municipio de Cihuatlán han sido testigos de una transformación drástica en el paisaje que los rodea. Lo que alguna vez fue un entorno verde y lleno de vida, ahora se ve opacado por muros de concreto que han reemplazado a los árboles.  

• La tala del árbol centenario en pleno Día de la Educación Ambiental fue la gota que derramó el vaso y los llevó a alzar la voz.

En una serie de testimonios recopilados en la localidad de Jaluco, residentes expresaron su preocupación y descontento respecto a las obras en curso que, señalan falta de transparencia y participación ciudadana en la planificación y ejecución de estas acciones.

"Pues estamos inconformes porque nos taparon la pasadera, ya no vemos para la carretera. Antes nos divertíamos, aunque sea viendo los carros, incluso los niños, pero nos taparon. Ahora ni la escalera tenemos para subir. Ya tenemos que rodear por allá o por acá, por el Oxxo, entonces así nos afecta.”

 “Nada, nadie me informó nada, y todo el mundo está inconforme también porque tumbaron el árbol aquel día. Porque pues nadie dijo nada y ese árbol ha aguantado hasta los ciclones. Ellos nomás llegaron y ¡pum, lo tumbaron!

“De hecho, se dijo que habían pedido firmas para hacer eso. ¿Quién pudo haber firmado? Nomás viven ellos y Lety, y si acaso la del hotel. Las demás pues es la delegación, la casa de allá es de turistas de fuera. Entonces, ¿a quién le pidieron firmas? A nadie. Llegaron, quitaron e hicieron lo que quisieron. Y la verdad, ese muro para empezar nos tapa el aire."

• Esta metamorfosis ha despertado inquietud entre los ciudadanos, quienes señalan que la tala de árboles se ha vuelto una constante en las obras públicas.

Los colores de las primaveras y rosas moradas han dado paso al monótono gris, dejando a la comunidad con la sensación de que se están perdiendo más que simples elementos estéticos y conjeturas aparte, señalan que la madera ya está vendida incluso antes de cortar los árboles.

"No, pues que ya no lo voy a ver y aparte que me quitaron todos los árboles que tenía yo enfrente, bien bonitos. Tenía mi pasto, el muchacho que andaba quitando, el de la máquina, dijo: 'Es que no debe sembrar donde no es de usted. Eso es federal'.

"Hay una transformación en el paisaje, sí, porque ya no tenemos la vista bonita de los árboles y del pasto. Y aparte, yo aquí me sentaba para ver el panorama y ahora, pues no sé"

- ¿Cuál es su panorama ahora?

-Pues ese muro.

-¿Como ha ido cambiando el paisaje urbano aquí en Cihuatlán?

-Ya se acabaron los árboles. Si nada más en el cerro de “La Cala” había ahí un arbolón, grandote, bonito. Y también ese se acabó.

- ¿Y en su lugar que pasa, que los reemplaza?

Nada, construcciones. Había unas higueras muy grandes que se unían arriba, muy añejas de plano. Y no quedó ni el rastro, quedó todo limpio. Van demoliendo todo lo que les estorba. Unas parotas era lo que había.

Para los ciudadanos, estas construcciones representan más que simples cambios en la infraestructura; son obstáculos que afectan directamente su día a día. Rodear para cruzar hacia el transporte público, desconectarse de las vías de enlace y perder visibilidad en sus comercios son solo algunas de las incomodidades que enfrentan.

La preocupación va más allá de la inconveniencia diaria.

Los habitantes temen las posibles consecuencias del levantamiento de estos muros, recordando cómo la elevación de la carretera en el pasado resultó en inundaciones. Ahora, con la introducción de estos nuevos muros, la incertidumbre sobre las potenciales inundaciones ha vuelto a florar entre la población, que se siente desinformada y desprotegida.

Y aunque la obra es realizada por el gobierno del estado, los ciudadanos señalan que no hay proyecto en el municipio que no pase antes por la aprobación del cabildo, por lo que exigen una respuesta, o al menos se les explique de que se trata la obra