Ediles de Morena lamentan que no se dialogó con boleros sobre el cierre de la plaza Liberación
Foto: Ignacio Pérez




 Guadalajara, Jalisco 

Los regidores de Morena en el Ayuntamiento de Guadalajara expresaron su rechazo a las obras en el Centro Histórico tapatío, pero sobre todo, lamentaron la política de ‘blanqueamiento’ que están aplicando en las calles y espacios públicos, ya que al enmallar las plazas céntricas, se está desplazando al comercio ambulante.

Juan Alberto Salinas, coordinador de la bancada de Morena en el Ayuntamiento tapatío, precisó que esa política de nulo apoyo al comercio informal, no es nueva, pues así se ha hecho presente en las tres gestiones recientes, desde cuando Enrique Alfaro fue alcalde de la ciudad.

El edil dijo que la gestión de la presidenta municipal Verónica Delgadillo, no socializó el cierre de las plazas públicas con los aseadores de calzado.

“En el caso de la represión no hay que ir mucho tiempo atrás, el viernes de la semana pasada invitan a una comisión dictaminadora para poder generar la reubicación de estas personas que trabajan en la informalidad, particularmente boleros, en el primer cuadro del Centro Histórico, sin ningún tipo de evidencia de haber dialogado de manera previa con ellos.

Sabían con antelación que requerían algunas adecuaciones en el Centro Histórico y no hicieron nada para platicar con ellos, porque les interesa imponer su ego y hacer negocio con la obra pública, eso si no lo pierden ni un ápice, ni van a dejar de hacerlo”, dijo. 

Por ello, Juan Alberto Salinas dejo en claro que los cuatro ediles de Morena no van a votar a favor de la reubicación de los boleros, ni de los comerciantes ambulantes, aunque en la práctica, ya los quitaron de sus sitios de trabajo habituales. 

“Y para las dos cosas, no cuentan con el grupo edilicio de Morena, ni para desplazar sin diálogo, ni para hacer negocio con todo lo público. Ninguna de las dos cosas contarán con el voto del grupo de Morena en Guadalajara”, precisó. 

En la plaza de la Liberación y la plaza Fundadores, ya se colocaron enmallados y ya no están las sillas para lustrar calzado. Ahora, a los boleros los movieron a otros espacios de la zona Centro mientras duran las obras de remodelación para el Mundial de Futbol 2026.

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Ignacio Pérez Vega