Guadalajara, Jalisco. 

Rogelia Martínez es una adulta mayor que vive con su esposo en una casa propia de la colonia Santa María del Silo, en Guadalajara.

Un día se levantó y le sorprendió un cartel azul pegado en la puerta de su casa. Era del SIAPA y decía

“Predio en proceso de colocación de reductor o supresor del servicio de agua potable, derivado del adeudo vencido que presenta la cuenta con este organismo”.

Ella no entendió el motivo porque está al corriente con su pago, así que lo ignoró. A los 15 días le cortaron el agua, así que llamó y llamó y llamó al Siapa exigiendo una aclaración que nunca llegó.

De hecho, exhibió una copia del recibo pagado afuera de su casa junto al cartel azul y también colgó una carta que decía: Señores del SIAPA, por este medio les dejo copia del recibo que indica “no adeudo” y también

les dejo los números de reporte pidiendo la reconexión del servicio, así como también el retiro de la calcomanía que colocaron en mi puerta.

Lo que hizo el SIAPA en la casa de la señora Rogelia se repitió con sus vecinos, y al corte de octubre, se lo había hecho a 57 mil 972 predios más dentro del Área Metropolitana de Guadalajara por, supuestamente, presentar adeudos, algunos de los cuales no son reales.

Para lograr este alcance colocando calcomanías y dispositivos supresores de flujo de agua potable a presuntos morosos, el SIAPA contrató en enero de este año a la empresa Stratimex exclusivamente para fines de cobranza, ya que la cartera vencida del organismo ha crecido sin parar. 

Pero el contrato que firmó el SIAPA con la empresa señala una condición específica: las únicas cuentas que serán amonestadas, e incluso sufrirán corte de agua, son las que correspondan a actividades comerciales, no domésticas, ya que el agua es un derecho humano y, aun con adeudo, es inconstitucional cortarla a un ciudadano.

• Pero el SIAPA ignoró sus propias condiciones y proporcionó a la contratista datos de cuentas domésticas, con y sin adeudo, para amedrentarlas y cortarles el suministro.

A través de visitas en campo y entrevistas con propietarios de fincas amonestadas en esa colonia y en el Centro de Guadalajara, UDGTV Canal 44 constató que más de una decena no son giros comerciales sino viviendas, cuyos dueños reconocen en su mayoría tener adeudo, aunque no en todos los casos les cortaron el agua.

Se consultó con el SIAPA sobre la razón por la que apercibieron giros domésticos, violando el contrato que ellos crearon con la empresa de cobranza, pero simplemente no dieron respuesta.

No obstante, vía transparencia el organismo contestó que con esta medida consiguió recuperar 260 millones de pesos.

 Aunque parecería una suma considerable, en realidad es ínfima, ya que la cartera vencida al corte de octubre de 2024 ascendía a 17 mil 20 millones de pesos, y apenas en 2022 era de 13 mil millones de pesos, lo que indica que ha crecido aun con estrategia de recuperación.

De acuerdo con Mirna Avilés, coordinadora de Proyectos Especiales en Materia Hídrica del Colegio de Ingenieros de Jalisco, el hecho de que la mitad de los usuarios del SIAPA tenga adeudos es una respuesta de los ciudadanos al servicio que reciben.

Es decir, ante los cortes injustificados y dotación de agua sucia, la molestia ha derivado en falta de pago.

"Sí existe un volumen importante en tema de cartera vencida, pero si nos vamos y hacemos un análisis de cuánto representa el uso comercial contra el habitacional, la parte comercial es donde más podrían captar, no acá, y hacerlo con la población puede generar más resistencia cuando hablamos del SIAPA,

todas las estrategias deberían enfocarse a la parte comercial, industrial, los grandes consumidores de agua y proteger más al usuario en ese sentido".

En contraparte, el director del SIAPA, Carlos Enrique Torres, ha declarado durante todo el sexenio que el agua de mala calidad que ha dotado a la ciudadanía es consecuencia del mal estado de la red de distribución, que data de 80 años y está oxidada. Incluso ha estimado que se necesitan ocho mil millones de pesos, que no tiene el organismo, para renovar esa red.

Es decir, con lo que deben los usuarios se podría pagar dos veces dicha infraestructura y hasta sobraría, pero no ha logrado recuperar el monto.

El consultor en materia hídrica, Josué Sánchez Tapetillo, explicó que esta respuesta del titular de SIAPA sólo busca justificar la mala calidad del agua pero no la resuelve, y en consecuencia, los ciudadanos dejan de pagar, agudizando el problema financiero del organismo.

"Se vuelve un círculo vicioso. Tiene mucho que ver que el servicio que estamos recibiendo no es el adecuado; la gente se queja de que no recibe agua en su casa y ya es un motivo para no pagar, llaman y el SIAPA no atiende, es un mal servicio, se recibe con mala calidad.

Eso está documentado. Muy probablemente tenemos problemas de potabilización, eso no motiva la cobranza. Por otro lado, el hecho de que se niega por parte de la autoridad los reportes de la ciudadanía, hay una desconfianza del discurso que se maneja desde el organismo".

El mal servicio de agua potable alimenta la falta de pago, y la falta de pago no ayuda a mejorar la infraestructura. ¿Cómo hacen otros países para evitar esto? Invirtiendo una cifra sustancial en calidad y atendiendo al usuario.

Junto con un equipo de técnicos del CICEJ, Mirna Avilés visitó este año cuatro países asiáticos para aprender sobre sus sistemas de abastecimiento de agua. Encontró que, en Corea del Sur, por ejemplo, la cartera vencida alcanza apenas el 3 por ciento de los usuarios,

ya que el organismo operador de agua rebasa los parámetros de la ONU en materia de calidad e incluso cuenta con una red de abastecimiento de acero inoxidable, lo que le permite transportar agua en grado alimenticio hasta los hogares.

• En México, en cambio, la cartera vencida es del 50 por ciento y el SIAPA cuenta con tuberías antiguas de asbesto, cemento, hierro, y las más modernas son de PVC.

"Los estándares que marca la ONU en cuanto a medición de calidad de agua son 110 parámetros. Corea del Sur implementa 385 porque lo que hace mucho es monitorear la satisfacción de los usuarios.

Para ellos es importantísimo cuando uno llama y les dicen que sienten un sabor mayor a cloro, se ponen enseguida a revisar si algo falló; es un monitoreo constante. Esto es el resultado de años y años de inversión.

Actualmente, la Zona Metropolitana de Seúl invierte lo equivalente a 22 mil millones de pesos solamente en tema de abastecimiento, sí creemos nosotros que ese mismo modelo se puede implementar aquí".

A diferencia del agua pulcra que beben del grifo los ciudadanos de Seúl, los tapatíos han recibido en esta administración agua de todas las gamas de colores, pasando por el gris, ocre, amarillo, café y hasta tonalidad ladrillo, y

aunque la autoridad siempre culpó a la antigüedad de la red, no hubo inversión en este sexenio para renovar al menos los tramos más deteriorados.

En cambio, de no pagar el recibo por cualquiera que sea la razón, el usuario será exhibido en público y presionado para hacerlo con la privación del derecho humano al agua potable.